Vista general de la exposición, Sala Amárica
Lugar: Sala Amárica, Vitoria
Organiza: Diputación Foral de Álava
Del 13 de junio hasta el 25 de agosto de 2019
Comisario: Sema D’Acosta
Esta propuesta se plantea como un proyecto abierto para pensar sobre cómo suceden las cosas. Es, digamos, una exposición sobre investigaciones y combustiones de taller, sobre cómo las ideas se transforman y comunican a través de las imágenes. Las tres autoras seleccionadas, IXONE SÁDABA (Bilbao, 1977), NAIA DEL CASTILLO (Bilbao, 1975) y MIREN DOIZ (Pamplona,1980), entienden la fotografía de un modo común, dando especial importancia en su trabajo a la práctica reflexiva en el estudio antes que a la búsqueda azarosa de instantes por capturar. Estamos viviendo un momento de transición hacia un modo nuevo de entender la fotografía que poco tiene que ver con el sentido documental que ha predominado en el siglo XX, un panorama distinto donde se generan, sobre todo, situaciones y procesos experimentales. Precisamente por la capacidad de retroalimentación de la imagen, al mismo tiempo objeto y representación, estas creadoras la usan cuestionando su vertiente narrativa y llevándola a otros terrenos que se entrecruzan con diferentes disciplinas expresivas, desde la escultura y la pintura hasta la performance o la instalación espacial. En correspondencia con el sentido especulativo de la exploración artística, aquí cobran especial relevancia las fases de trabajo más que la exhibición de piezas finales; de alguna manera, se intenta destapar qué caminos recorren cada una de ellas para construir su obra y cuáles son las preocupaciones que les inquietan en ese recorrido.
DURANTE, DESPUÉS pretende reconsiderar algunos planteamientos convencionales sobre el significado de una muestra de arte contemporáneo, asumiendo que la extrema porosidad de la fotografía actual no encaja con ciertos parámetros comúnmente establecidos dentro de una sala de exposiciones; no tanto en el modo de plantear las piezas en el espacio, sino en el de comprender las obras como trabajos conceptuales implicados en un desarrollo creativo-expresivo que supera la simple lógica de los objetos museables. La fotografía puede ser (o no) una pieza acabada, pero su variabilidad incumple cualquier trayectoria previsible, entre otros motivos porque consigue presentarse de infinidad de maneras válidas. Debido además a esta naturaleza mudable, el proceso es casi siempre más interesante que el resultado; ayuda a conocer desde dentro los virajes y dudas del artista, sus hallazgos, su modo de aproximarse a la imagen y trabajar sobre ella. De improviso, nos mete de lleno en su intimidad acercándonos de forma espontánea a sus modos de pensar. Es ahí, exactamente, en ese lugar personal e inaccesible que se genera en el estudio, donde podemos conocer su universo interior. En algunos casos se exhiben dentro de la sala piezas acabadas y cerradas; en otros, actividad todavía sin finalizar, ensayos extraídos del taller que nos descubren la trascendencia de un itinerario que permite modificaciones de manera orgánica. Pretendemos mostrar el haz y el envés del trabajo de cada autora, tanto el escenario como el backstage, dando igual protagonismo -o más- a las etapas previas que a su estado definitivo.